miércoles, 3 de julio de 2024

JULIO IRIBARNE. Las placas conmemorativas como documentos históricos.

JULIO IRIBARNE. Las placas conmemorativas como documentos históricos.

Fotos personales tomadas el 3 de mayo de 2024
Las placas recordatorias o conmemorativas cumplen una función de documentos históricos que nos brindan información que no siempre tenemos fácilmente a nuestra disposición. Es por ello que estas placas tienen que ser cuidadas y conservadas como si este cementerio fuera parte del Archivo General de la Nación. En la primer placa podemos leer: "A JULIO IRIBARNE. Sus condiscípulos. In memoriam. +17 diciembre 1933" En ella vemos en un medallón enmarcado por palmas de LAUREL Y ROBLE el rostro de este médico. En la parte inferior los símbolos de la medicina: la Copa de HIGIA con la conocida serpiente, el CADUCEO de Esculapio y una PALMA DE GLORIA. En la otra placa leemos: "Los empleados de la Facultad de Ciencias Médicas a su ex Decano Dr. JULIO IRIBARNE en el primer aniversario de su fallecimiento. 17-12-1934". Esta placa esta firmada por la empresa que la realizó.
RECURSO.
El Dr. lribarne fue profesor titular de Ginecología, dos veces Decano de la Facultad de Ciencias Médicas de Buenos Aires, uno de los profesores más ilustres, llamado el Decano de las reformas universitarias, escritor y sociólogo profundo conocido y respetado en todos los centros científicos de Europa y del Nuevo Continente, director de la "Revista Médica Latino Americana". Lamentamos el fallecimiento de este colega que no solamente era una gloria del cuerpo médico argentino, sino de la América Latina.




SCARANO. En un pequeño espacio muchos símbolos.

SCARANO. En un pequeño espacio muchos símbolos.

Fotos personales tomadas el 3 de mayo de 2024
Aquello que me llama la atención como los símbolos dialogan entre ellos y amplían su significado. En este TIMPAÑO vemos en unión la CLEPSIDRA ALADA que es siempre una invitación a un uso productivo de nuestro tiempo actual porque las alas nos sugieren que todo es muy breve. A este mensaje se unen dos CORONAS que con su forma circular nos hablan de aquello que siempre se renueva porque es un eterno recomenzar. Se unen en esa corona las flores de NOMEOLVIDES que son como un compromiso de hacer memoria de quienes aquí yacen. Los LAZOS que acompañan estas coronas completan el mensaje con aquello que simbolizan los lazos familiares o de amistad. Complementa este mensaje las HIEDRAS que adornan con mucha elegancia las puerta de este monumento funerario transformando a esta puerta en una entrada a un tiempo sin principio ni fin, es decir eterno.
RECURSO
SCARANO. Apellido de una antigua familia, originaria del territorio de Nápoles, que se ha extendido a lo largo de los siglos en varias regiones de Italia y del mundo. El origen de esta apellido, en nombre de ilustres genealogistas, debe buscarse en el personal de "Scaranus", probablemente perteneciente a un progenitor, hoy desconocido. Pero si, por razones desafortunadas, la historia, pero a veces cruel, la historia nos ha privado del conocimiento profundo, del momento en que esta familia fue elevada a la nobleza, podemos, sin embargo, sentirnos satisfechos con nuestro deseo de saber, desde el momento que los nombres de los miembros de la familia Scarano se encuentran a menudo en documentos y escrituras notariales, desde los siglos pasados, de los cuales aparece su alto estatus. Recordamos, a este respecto: cav. Ascanio, capitán de armas, de la corte imperial de Federico Barbarroja; Camillo, asesor del rey Alfonso de Aragón; cav. Paul, de Caserta, entre los hombres ilustres ...




3 de Julio. 172º aniversario del nacimiento del escultor LUCIO CORREA MORALES.

3 de Julio. 172º aniversario del nacimiento del escultor LUCIO CORREA MORALES.


Lucio Correa Morales es considerado el primer escultor argentino.

Nació en 1852 en una estancia en Navarro
, y a los 13 años se trasladó a la Ciudad de Buenos Aires.
Impulsado por sus primos, el naturalista y dibujante Eduardo Holmberg y el Perito Francisco P. Moreno, en 1874 ganó una beca para estudiar en la Academia de Bellas Artes en Florencia, Italia, donde tuvo como maestro al escultor Urbano Lucchesi.

En 1882 regresó a Buenos Aires donde obtuvo el cargo de Administrador del recién creado Jardín Zoológico.
Fue profesor en la Academia Estímulo de Bellas Artes y en la Facultad de Arquitectura.
Correa Morales fue el maestro de la primera generación de escultores argentinos, entre ellos Rogelio Yrurtia, Pablo Curatella Manes y Pedro Zonza Briano.
Su obra “Falucho" fue el primer monumento de un escultor argentino emplazado en la ciudad de Buenos Aires.
Entre sus obras se destacan “Ondina del Plata” -también conocida como "La Primavera"- (1880) que está en el Jardín Botánico (foto), “Río de la Plata” y “La Cautiva” (1905).
Todas muestran su carácter indigenista y criollo, enriquecido por sus viajes al interior del país en compañía de naturalistas y científicos. Hay obras suyas en varias provincias argentinas, museos e instituciones. [Agradezco este aporte de Daniel G. La Moglie]
En el Cementerio de la Recoleta encontramos una obra de este escultor en el monumento funerario de ÁNGELA MENENDEZ que se titula "Serenidad". Vale la pena tenerla en cuenta porque, a mi entender, es una de las obras más destacada de este artista. 






martes, 2 de julio de 2024

MANUEL BRAULIO GREGO. Manufactura de Tabacos "Particular"

MANUEL BRAULIO GREGO. Manufactura de Tabacos "Particular"

Fotos personales tomadas el 14 de febrero 2024
En esta placa conmemorativa en el frente de un monumento funerario muy deteriorado podemos leer: "MANUEL BRAULIO GREGO. Q.E.+P.D. XXIV-XI-MCNXXXVII. El Personal de la Manufactura de Tabacos "Particular" como sincero homenaje al cumplirse el primer aniversario de su fallecimiento. 24-XI-1938". En esta placa vemos como figura central una DOLIENTE con su cabeza cubierta en señal de duelo y que con su mano derecha deja caer rosas como símbolo del afecto del personal de la manufactura de tabacos y en la mano izquierda lleva la PALMA de la gloria. Es posiblemente uno de los pocos ejemplos donde vemos a esta doliente con los pies calzados. Guirnaldas de HIEDRAS completan el mensaje deseando que este homenaje sea eterno.
RECURSO.
Manuel B. Grego. Un caballero del viejo cuño
Por Héctor José Iaconis
EN 9 DE JULIO
Siendo muy joven, Manuel Grego, se vio interesado por la política y adhirió al Autonomismo. En 1874, durante la revolución, tomó parte con el grado de capitán de Guardias Nacionales.
Radicado en el Partido de 9 de Julio, donde poseía un establecimiento rural, fundó más tarde una casa de remates, ferias y consignaciones de frutos del país, una de las primeras en su época y que en sus giros comerciales alcanzó a abarcar una amplia zona del oeste de la provincia de Buenos Aires.
En 9 de Julio mantuvo una larga relación de amistad con el líder conservador y referente del autonomismo local. Nicolás L. Robbio. Más aún, Don Manuel fue el primer secretario municipal luego de sancionada la Ley Orgánica de las Municipalidades en 1886. En este cargo, desarrolló una interesante tarea organizativa.
Durante su gestión como secretario municipal, que comenzó el 16 de agosto de 1886, levantó el primer registro de vecindad en el Partido. Esta importante iniciativa permitió tomar conocimiento de la población, de la situación de los vecinos y de las particularidades de los diferentes estratos sociales que convivían y conformaban la comunidad a mediados de la década de 1880
Otra labor encomiable desarrollada por Grego, como secretario del intendente West, fue la reorganización del archivo municipal. Tal como lo refiere el historiador Buenaventura N. Vita, en el mismo primaba un gran desorden que hacía completamente dificultoso hallar cualquier documento.
“Con una voluntad -afirma Vita- y una dedicación singular y digna de encomio por todo concepto, Grego, trabajó durante tres meses consecutivos, fuera de las horas de oficina, por la noche y en los días de fiesta haciendo la ordenación, clasificación por materias y por años de todos los documentos útiles del archivo. Los distribuyó en carpetas distintas, para legajarlos luego por año, catalogándolo todo”
Se hizo construir un gran armario biblioteca adecuado para el objeto a que se destinaba. Asimismo, se mandaron imprimir carátulas para las carpetas y para los legajos, dejando como resultado un archivo perfectamente ordenado y catalogado.
Para comprender de la importancia del trabajo archivístico que realizó Grego, bastaría reflexionar un momento sobre la labor que habrá demandado revisar 16.985 documentos y expedientes varios, sobre las cuestiones más diversas, ordenándolos por materias en 401 carpetas legajadas y a su vez en 41 legajos que componen el archivo de veinte años de administración municipal. Además, el secretario consignó de su puño y letra las cifras con catálogo en manos. Esta tarea le demandó contracción, paciencia y una dosis muy grande de buena voluntad, pues lo hizo completamente ad honorem
Hasta 1894 acompañó como secretario, de manera alternada, a los intendentes Tomás West y Nicolás L. Robbio. En 1895 aparecía como secretario del Comité de la Unión Local, corriente política que tenía como principal referente a Nicolás L. Robbio.
Años más tarde, desde enero de 1903 hasta febrero de 1904 se desempeñó como secretario del polémico intendente Rafael Prieto.
En 1899, aunque por breve tiempo, se desempeñó como miembro del Consejo Escolar, ocasión en la cual West era presidente de ese cuerpo.
FUNDADOR DEL CLUB SOCIAL DE 9 DE JULIO
Manuel B. Grego estuvo vinculado a varias instituciones nuevejulienses. Entre ellas se pueden mencionar al denominado Club Social de Nueve de Julio.
Después de varios años de no contar con un centro social, siguiendo el movimiento de renacimiento que se había despertado en el vecindario, entre varios vecinos se lanzó la idea de construir un club social, y para ese objeto se reunieron el 24 de octubre de 1897 en los altos del Hotel Monteverde (primer piso, sobre el hall del Teatro Rossini).
Grego fue uno de los fundadores e integrante de la primera Comisión directiva, junto a otros conocidos vecinos de entonces: el comerciante Salvador Velarde, el médico Ernesto Carbó, Adolfo Pastorino, el industrial Agustín P. Taurel, el comerciante Germán Moro y el escribano Eduardo A. Mouchard, Manuel B. Grego, entre otros.
EN LA FUNDACION DE CARLOS CASARES
Manuel B. Grego estuvo presente en los momentos iniciales de la fundación del denominado Pueblo «Maya, hoy Carlos Casares. En 1897, en representación de Francisca Maya de Fernández Álvarez, Domingo y Agustín Maya, se presentó ante el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, solicitando la aprobación de la traza del pueblo «Maya» y había comenzado a fundar Antonio Maya, padre de los poderdantes.
Merced a las gestiones realizadas por Grego, el 1º de julio de 1897, el Poder Ejecutivo aprobó el fraccionamiento, ubicado en las inmediaciones de la estación ferroviaria «Carlos Casares». Este sería más tarde el pueblo cabecera del partido, creado por la ley del 8 de enero de 1907, con ese mismo nombre.
Cabe recordar que, una vez delineado el ejido urbano y amojonadas las parcelas del nuevo pueblo, don Manuel Grego, que era martillero público, sacó a la venta esas tierras en un remate público realizado el 12 de marzo de 1907.
EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Después de 1917, los miembros de la familia Grego se habían radicado definitivamente la ciudad de Buenos Aires. Allí, desde hacía varios años, su hijo Virgilio, se venía dedicando a la manufactura de cigarrillos. Más aún, es probable que Manuel haya dejado un poco antes 9 de Julio.
Virginio Grego fundó, el 31 de julio de 1922, la empresa ‘’Manufactura de Tabacos Particular’’, en un pequeño local ubicado en la calle Provincias Unidas 2902 (hoy Juan Bautista Alberdi). Con el correr de los años, ésta se convirtió en una de las principales industrias en su tipo, que a fines de los años 60 sería adquirida por la multinacional Reemtsma de Alemania para luego fusionarse con Massalin y Celasco (dominada por Philip Morris)
Tal como lo sugiera un artículo de «Caras y Caretas», de la década de 1930, don Manuel Grego, “no fue ajeno al desenvolvimiento sorprendente del gran establecimiento en vida de su hijo, al cual supo dedicarle el fruto de su experiencia en los negocios, su maduro consejo y hasta la colaboración efectiva desde puestos directivos”.





MANUEL BRAULIO GREGO. La epopeya de poblar las fronteras interiores

MANUEL BRAULIO GREGO. La epopeya de poblar las fronteras interiores.

Fotos personales tomadas el 14 de febrero de 2024
Tenemos que tomar muy en serio que el Cementerio de la Recoleta es un ARCHIVO HISTÓRICO con documentos únicos que muy posiblemente complemente de manera significativa el patrimonio de otros archivos históricos. Esta placa es una introducción a una vida que se mantiene en la memoria de una localidad. En ella podemos leer: "MANUEL B. GREGRO. Q.E.P.D. +24-noviembre-1937. Su esposa e hijos le dedican este recuerdo". El rostro que nos presenta esta placa es muy similar a la foto que hemos encontrado de esta personalidad.
RECURSO.
Manuel B. Grego. Un caballero del viejo cuño
Por Héctor José Iaconis
* Pobló estas tierras, donde hoy se extiende el Partido de 9 de Julio, cuando aún los soldados se disputaban el territorio con los malones aborígenes.
* Fue el secretario de la Municipalidad cuando, en 1886, el doctor West se convirtió en el primer intendente.
* Participó activamente en la fundación de la actual ciudad de Carlos Casares y fue el encargado de vender los primeros lotes de tierras en la misma.
* Dedicado a la actividad agropecuaria, en 9 de Julio, fundó una casa de remates, ferias y consignaciones de frutos del país, una de las primeras en su época, que cubría una amplia región de la Provincia.
* Ya radicado en la ciudad de Buenos Aires, participó junto a su hijo Virginio, en la fundación de la empresa manufacturera de cigarrillos «Particulares».
Alejado de nosotros por varias generaciones, excluido del vértigo de los tiempos modernos, el personaje histórico que nos ocupa fue un hombre destacado entre sus contemporáneos. Los nuevejulienses de finales del siglo XIX y comienzos del XX, lo respetaban por sus cualidades morales y, sobre todo, por la mesura con que acostumbraba mostrarse, salvo excepciones, frente a cuestiones de la política lugareña.
Siendo niño conoció de cerca la vida en el interior bonaerense cuando aún, visto como un desierto, era considerado entonces como “un lugar idílico pero siempre agreste, que debía ser civilizado”. Sin dudas, Manuel B. Greco, también vivió de cerca la dicotomía entre civilización-barbarie, tal como lo veía el pensamiento progresista de la época. Y, en efecto, trabajó a su modo para contribuir a poblar ese espacio que se iría completando paulatinamente con la población inmigrante.
Al redactar los párrafos que siguen, es inevitable preguntarnos ¿qué puede decirnos a nosotros, hombres y mujeres del siglo XXI, un hombre que vivió tantas décadas atrás?
Sin dudas, con su biografía, nos mostrará, al menos de manera sucinta o como un cuadro fotográfico que pasa rápidamente ante nuestros ojos, un pasado lejano en el cual, como ahora, también hubo penas, alegrías, luchas y frustraciones.
Nacido el 20 de marzo de 1853, su padre, don Angel Grego (1820-1885), inmigrante italiano, fue uno de los fundadores de ese pueblo. Según un artículo publicado en la revista «Caras y Caretas», don Angel Grego, había sido «uno de los ilustres fundadores de Chivilcoy que, con noble esfuerzo y la inteligencia, cimentó su rápido progreso».
Agricultor de profesión, junto a otros labradores, en mayo de 1854, había elevado a la Sala de Representantes una denuncia sobre los abusos de los enfiteutas que, sin pagar éstos el canon establecido por el Estado, arriendan la tierra pública.
Manuel Braulio Grego se crio en un espacio en el cual se fomentaba la lectura. Si bien, su padre no era una persona de dotes intelectuales, ni mucho menos, poseía una interesante biblioteca, de la cual aún se conservan en esta ciudad algunos libros con su monograma.
La formación de Manuel estuvo imbuida en dos modelos culturales de su tiempo; identificada con los paradigmas de civilización que se inspiraban en Europa y en algunos personajes ingleses que, en ciertas novelas sentimentales e históricas de la época, aparecían como ejemplos de sociabilidad, laboriosidad y ciudadanía.
En el Censo Nacional de Población de 1869 aparece viviendo en Chivilcoy, junto a sus padre y hermanas menores.
Vivió el tiempo en que, parecía estar claro que dos colectivos eran presentados como anti-modelos de la civilización: los aborígenes y los gauchos. Conoció, como hombre público y asiduo lector, la transformación del espacio del interior, “considerado en el imaginario del siglo XIX como un desierto que los inmigrantes europeos debían transformar y cuyo vacío debían llenar con su descendencia”.


JULIO IRIBARNE. Las placas conmemorativas como documentos históricos.

JULIO IRIBARNE. Las placas conmemorativas como documentos históricos. Fotos personales tomadas el 3 de mayo de 2024 Las placas recordatorias...