BAGLIETTO FASCE. Los retratos funerarios: herramientas de la memoria.

BAGLIETTO FASCE. Los retratos funerarios: herramientas de la memoria.

Fotos personales tomadas el 4 de mayo de 2024

Los retratos y fotos que acompañan las lápidas y monumentos funerarios tienen una larga historia en la evolución de la humanidad. Muchos antes que aparecieran las fotografías el ser humano sintieron la necesidad de mantener vivo la memoria de un rostro y de una persona relacionada con sus afectos. Frente al sentido de lo transitoria estas imágenes permitían sobreponerse a ese límite temporal. Las raíces de esta práctica se remontan a diversas culturas como las máscaras mortuorias que intentaban hacer presente como un sacramento la imagen de las personas fallecidas. Desde el punto de vista literario las descripciones biográficas de esos seres considerados importantes, tanto para la vida familiar como pública, tal como las vemos en lo que se llaman LAUDAS SEPULCRALES, como vemos en las dedicatorias de muchas placas conmemorativas. En el mundo romano que tanto influye aún hoy en muchas prácticas funerarias los BUSTOS eran el elemento que se colocaba en el espacio relacionado con la ‘pater familia’ para formar parte de una liturgia religiosa que invocaba a través de diversas ceremonias la presencia de esas personalidades que se consideraban esenciales para el presente. Es muy posible que esta mentalidad subyace detrás de los muchos bustos que forman parte del patrimonio de este cementerio. Las máscaras mortuorias fueron, por supuesto, muy utilizadas en la cultura funeraria del antiguo Egipto, en un primer período en forma idealizada para ir cambiando hacia un gran realismo en el transcurso de los siglos. Son muy interesante los retratos muy realistas en las momias del último período de la cultura egipcia clásica. Son de una calidad excepciona las encontradas en la necrópolis de El-Fayun que son, a mi entender los retratos de difuntos pintados sobre tablas de madera de un realismo que tendrá una gran influencia en la cultura religiosa bizantina. Al igual que observamos en la mirada eterna de muchos bustos que abundan en este cementerio la mirada de aquellos primeros retratos funerarios revelan una mirada que se sobrepone a la finitud que nos anuncia el tiempo. En la placa superior podemos leer: "MANUEL D. BAGLIETTO. ¡Viejo! ¡Papá! ¡Abuelito!. Eterno será nuestro amor como grande fue tu cariño hacia nosotros. Tu esposa, hijos y nietos. En el 1º aniversario 28-11-69-70" Vemos en esta sentida placa aparecer justamente el intento de eternizar un momento y un sentimiento. La dolientes que hace visible ese sentimiento sostiene el medallón con la foto de este ser querido.